Un hiposfagma es una pequeña hemorragia que se produce bajo la capa más superficial de la conjuntiva, la membrana que cubre la parte blanca del ojo. Se manifiesta como una mancha roja en la parte blanca del ojo, que generalmente es inofensiva y puede desaparecer por sí sola en pocos días. Puede aparecer por diversas causas, como un estornudo fuerte, levantar pesas o incluso por una presión arterial elevada. También puede asociarse a condiciones como el uso de ciertos medicamentos anticoagulantes o problemas sanguíneos. En general, un hiposfagma no suele ser doloroso y no afecta la visión. En la mayoría de los casos, no requiere tratamiento. Sin embargo, si la mancha es muy grande, no desaparece en varios días o se presenta con dolor ocular, secreción o alteraciones en la visión, se recomienda consultar a tu oftalmóloga, ya que podría ser signo de algún problema más serio.